Cascos de bicicleta de carretera 

La seguridad sobre las dos ruedas siempre es lo más importante. Y el elemento clave para conseguirla en el ciclismo es, sin duda, el casco. En el caso de los cascos de bicicleta de carretera, su uso es obligatorio, ya que el riesgo de accidente es constante y se ha demostrado su eficacia para minimizar los daños.

A la hora de elegir y comprar cascos de ciclismo de carretera pueden llegar a marearte la cantidad de modelos distintos que existen en el mercado, con características bien diferentes y precios que abarcan una horquilla amplísima.

Es evidente que la calidad se paga y que los cascos de bici de carretera de gama alta siempre son los que exigen una mayor inversión, a cambio de mayor seguridad, confort y todo tipo de prestaciones. Si quieres apostar por lo mejor de lo mejor en cascos de carretera, en Ciclos Campuzano tienes una selección con los modelos top de las marcas más reconocidas.

Si tu presupuesto es más ajustado o el uso de la bici es más esporádico y no quieres renunciar a la calidad, puedes estar tranquilo, porque ponemos a tu disposición una amplia variedad de cascos de bicicleta de carretera de gama media, que ofrecen resultados estupendos.

Lo importante es que elijas el casco que te haga sentir más cómodo y a la vez seguro, que te proteja sin que te des siquiera cuenta de que lo llevas puesto.

Comprar cascos de bicicleta de carretera: qué debes exigir

Existen infinidad de modelos de cascos de bicicleta de carretera en el mercado y en Ciclos Campuzano tienes a tu disposición una amplia selección. Para no perderte entre especificaciones técnicas te resumimos los puntos clave que debes tener en cuenta a la hora de comprar tu casco para bici de carretera.

La seguridad por encima de todo

Existen notables diferencias entre el grado de seguridad que proporcionan los modelos de casco de bicicleta para carretera que existen en el mercado.

Lo más básico que debes exigirle a tu casco para carretera es que esté homologado, es decir, que cuente con la certificación CE- EN 1708. Esto te garantiza que el casco que compras cumple con unos mínimos requisitos de seguridad y calidad.

Por supuesto, todos nuestros cascos están homologados, pero esto solo es la base, porque puedes encontrar cascos homologados con considerables diferencias en cuanto al grado de protección que ofrecen, que van a depender fundamentalmente de los materiales con los que están hechos y la forma en la que los han fabricado. 

Elige cascos de carretera ligeros y transpirables

En la carretera, todo peso es un lastre. La diferencia de peso entre un casco de gama baja, media o alta puede ser de más de 100 gramos y te aseguramos que este peso de más acaban notándolo, y mucho, tu cuello y tus cervicales. Y acaba pasando factura también a tu aerodinamismo y, por tanto, a tus resultados.

Así que lo mejor que puedes hacer, si la velocidad es importante para ti, es comprar un casco de bicicleta de carretera lo más ligero posible. Eso sí, siempre que esta ligereza sea el resultado de la innovación en los materiales y la fabricación y no de la mala calidad de estos.

A la hora de comprar cascos para ciclismo de carretera también debes tener en consideración las condiciones climatológicas y meteorológicas en las que vas a rodar la mayor parte del tiempo. La transpirabilidad es importante, para que el sudor y el calor no se acumulen en tu cabeza, pero lo es aún más cuando hace calor. Si vas a rodar bajo la lluvia o con mucho frío, quizá prefieras renunciar un poco a la transpirabilidad a cambio de llevar la cabeza más protegida frente a las inclemencias del tiempo.

Estas variaciones entre la transpirabilidad y la cobertura total se consiguen mediante los distintos diseños de los casos para bicicleta de carretera, con agujeros de ventilación más o menos grandes y con o sin rejilla debajo.

Comprar cascos para ciclismo de carretera: características principales

Si buscas un casco de bicicleta de carretera seguro, resistente, ligero y cómodo deberás tener en cuenta las siguientes características:

Talla

Existen distintas tallas de cascos de carretera que se basan en distintas medidas de perímetro craneal. Por lo general, todas las marcas elaboran sus cascos al menos en las tallas S, M y L y algunas añaden alguna talla más. Existen diferencias de calibración de cada talla en función del fabricante, así que lo mejor que puedes hacer es informarte bien de cómo talla el casco de bicicleta de carretera que has elegido antes de comprarlo.

Los cascos para ciclismo de carretera deben quedar siempre bien encajados. No deben ir sueltos, pero tampoco deben apretar. Un casco demasiado amplio puede llegar a salirse con el movimiento de las pedaladas o hacerlo con el impacto de la caída. Un casco demasiado pequeño te causará molestias y acabará resultando insoportable.

Materiales y diseño

La seguridad, la ligereza y la transpirabilidad de las que antes hablábamos dependen fundamentalmente de los materiales con los que está fabricado el casco de bicicleta de carretera. El polipropileno y el poliuretano son los dos materiales más utilizados en la fabricación de cascos de gama media y alta, con bastantes diferencias de efectividad en función de la calidad de los compuestos que se emplean en cada caso.

Si quieres ir un paso más allá en cuanto a la calidad de los materiales, puedes comprar cascos de bicicleta de carretera con el exterior de grafeno, que es más duro que el polipropileno.

La diferencia fundamental entre los cascos de gama baja, media y alta está en que los mejores cascos de bicicleta de carretera incorporan una red o tejido que evita que el poliuretano del interior salga despedido al partirse en caso de recibir un impacto.

El diseño del casco y la calidad del material empleado permite fabricar cascos más ligeros, con aberturas de ventilación más amplias y que sin embargo son igual de seguros o más que los cascos más cerrados.

Ajustes delanteros y traseros

Los cascos de bicicleta de carretera se ajustan a la cabeza mediante una rueda ubicada en la zona occipital. Esta rueda puede ser más o menos grande o estilizada. Debe poderse manejar con facilidad.

Los ajustes delanteros del casco deben ser suaves para que no molesten a ambos lados de la cara ni debajo de la barbilla. No tienen que tapar las orejas, sino rodearlas. Y en el mentón deben llevar alguna protección para evitar roces.